En la sociedad actual, los desequilibrios y desajustes alimentarios están relacionados con la aparición de un gran número de enfermedades. La falta de tiempo para cocinar, el ritmo de vida actual y la enorme oferta alimenticia que hace difícil la toma de decisiones adecuadas, conduce a que muchas personas no sigan una alimentación equilibrada, y por tanto, no ingieran todos los nutrientes que necesitan o las cantidades adecuadas. Esto da lugar a la aparición de enfermedades o trastornos diversos, como los gastrointestinales.

Trastornos digestivos

El sistema digestivo comprende un conjunto de órganos como son la boca, las glándulas salivales, faringe, esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso, hígado, páncreas, vesícula biliar, recto y ano. Realiza 5 funciones:

  • Ingestión: Entrada de los alimentos (comer, masticar, engullir).
  • Transporte: Mediante movimientos desplaza los alimentos por todo el sistema digestivo.
  • Digestión: Descompone (prepara) los alimentos para ser absorbidos.
  • Absorción: Pasa las sustancias necesarias para el cuerpo, des del sistema digestivo a la sangre.
  • Defecación: Elimina las sustancias no absorbidas.

    Los trastornos más comunes de la sociedad actual son:
  • Estreñimiento. Heces de consistencia dura y seca, difíciles de expulsar. Las causas más frecuentes son la mala hidratación, dietas pobres en fibra, consumo excesivo de proteínas animales.
  • Gastritis. Inflamación de la capa mucosa que recubre las paredes del estómago. Las causas más frecuentes son el consumo de tóxicos (medicamentos, café, alcohol, tabaco), la incorrecta masticación o las infecciones.
  • Diarrea. Heces de consistencia pastosa-líquida que pueden ir acompañadas de un olor fétido y urgencia en la evacuación de las mismas. Las causas más frecuentes son la intolerancia a algún alimento o las infecciones.
  • Gases intestinales. Gases que se acumulan y producen por fermentaciones intestinales a causa de alteraciones en la flora intestinal o por intolerancia a algún alimento.
  • Acidez de estómago. Síntoma que consiste en una sensación de quemazón localizada en la «boca» del estómago a causa de un reflujo del ácido del estómago hacia el esófago.

Productos o ingredientes que mejoran los trastornos digestivos.

Entre los productos que ayudan a mejorar los trastornos digestivos, detacan la Alcachofa, el Ajo, el Espárrago, la Cebolla, la Zanahoria, el Zumo de Aloe Vera, la Albahaca, la Salvia o la Fibra. Las propiedades nutricionales de estos principios activos son las siguientes:

  • Alcachofa. Se ha demostrado que la alcachofa ayuda a paliar la sensación de pesadez tras una ingesta excesiva de alimentos. Estimula el hígado y por tanto ayuda al cuerpo a eliminar toxinas. Estos efectos se deben principalmente a 2 de sus compuestos, la cinarina y la inulina. La cinarina, sustancia que proporciona el sabor amargo a la alcachofa, es reconocida por su efecto colerético, es decir, aumenta la secreción de bilis. La bilis es sintetizada por los hepatocitos, se almacena en la vesícula biliar y se vierte al duodeno cuando llegan las grasas de los alimentos. Por otro lado, la inulina, polisacárido abundante en esta verdura, estimula el apetito y favorece la digestión.
  • Ajo. Hay estudios que demuestran que los alilos presentes en el ajo inhiben una enzima (la HMG-CoA-reductasa) implicada en la producción del colesterol. El consumo de ajo también regularía el mecanismo de fibrinólisis implicado en la formación de coágulos. Su combinación con salvia y hojas de albahaca permite la aportación de esencias digestivas y revitalizantes.
  • Espárrago. Los espárragos son fuente de sustancias de acción antioxidante, como vitaminas C, E, provitamina A y compuestos fenólicos como los lignanos. Los antioxidantes bloquean el efecto dañino de los radicales libres. La respiración en presencia de oxígeno es esencial en la vida celular de nuestro organismo, pero también produce unas moléculas, los radicales libres, que ocasionan efectos negativos para la salud a través de su capacidad de alterar el ADN (los genes), las proteínas y los lípidos o grasas. Existen situaciones que aumentan la producción de radicales libres, entre ellas el ejercicio físico intenso, la contaminación ambiental, el tabaquismo, las infecciones, el estrés, dietas ricas en grasas y la sobre exposición al sol. La acción de los antioxidantes en la prevención de enfermedades cardiovasculares es hoy una afirmación bien sustentada. Se sabe que es la modificación del llamado “colesterol-malo» (LDL-c) la que desempeña un papel fundamental en el inicio y desarrollo de la aterosclerosis. Los antioxidantes bloquean los radicales libres que modifican el LDL-c. Contribuyen así a reducir el riesgo cardiovascular y cerebrovascular. Por otro lado, unos bajos niveles de antioxidantes constituyen un factor de riesgo para ciertos tipos de cáncer y de enfermedades degenerativas.
  • El espárrago es rico en potasio y pobre en sodio lo que le confiere una acción diurética que favorece la eliminación del exceso de líquidos del organismo. Son beneficiosos en caso de hipertensión, retención de líquidos y cálculos renales, a excepción de los provocados por sales de ácido úrico debido a su alto contenido en purinas. Con el aumento de la producción de orina se eliminan, además de líquidos, sustancias de desecho disueltas en ella.
    Los espárragos son ricos en fibra, concretamente en celulosa (fibra insoluble), por lo que presentan propiedades laxantes.
  • Cebolla. La cebolla contiene importantes cantidades de vitaminas y minerales como el azufre, fósforo, hierro, calcio, sodio y magnesio. Estimula el apetito y regularizan las funciones del estómago, tiene propiedades diuréticas y depurativas y por su considerable aporte de fibra también regula el estreñimiento. Es Eficaz contra las afecciones respiratorias y tiene propiedades desinfectantes.
  • Zanahoria. Es el alimento más rico en beta-caroteno, sustancia que tras ser absorbida en nuestro cuerpo se transforma en vitamina A o retinol. Ésta es esencial para la visión, el buen estado de la piel, los tejidos y para el buen funcionamiento de nuestro sistema de defensas. El beta-caroteno, sustancia antioxidante, al igual que la vitamina E, neutraliza los radicales libres, por lo que el consumo frecuente de zanahorias contribuye a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas y de cáncer. Además a los betacarotenos se le atribuyen igualmente efectos beneficiosos sobre el sistema inmunológico.
  • Aloe Vera. Es muy rica en nutrientes y otras sustancias de interés para nuestro organismo con acción emoliente, cicatrizante, coagulante, hidratante, antialérgica, desinfectante, atiinflamatoria, astringente, colerética y laxante. Los científicos han identificado más de 75 compuestos; principalmente vitaminas (betacaroteno, tiamina,  riboflavina, niacina, piridoxina, cianocobalamina, vitamina C y vitamina E), minerales (calcio, fósforo, potasio, hierro, sodio, magnesio, manganeso, cobre, cromo y cinc), enzimas como fosfatasas-amilasas-bradiquinasas que estimulan el sistema inmunitario y tienen acción analgésica y antiinflamatoria, catalasas que previenen la acumulación de agua en el cuerpo, celulasas que favorecen la digestión de la celulosa, creatina fosfoquinasa de acción en el músculo y lipasas que ayudan a la digestión. y aminoácidos.
  • Fibra. Actúa como regulador del tracto intestinal y evita el estreñimiento. El consumo de alimentos ricos en fibra contribuye a prevenir o mejorar el estreñimiento y otras afecciones relacionadas con el tracto gastrointestinal, tales como la enfermedad diverticular de colon, la hernia de hiato, las hemorroides y venas varicosas e incluso el cáncer de intestino grueso. Asimismo, la fibra contribuye a reducir la colesterolemia y la velocidad con la que pasan los azúcares hacia la sangre, lo que beneficia en caso de riesgo cardiovascular y diabetes.

Bibliografía.

  • Wegener T, Fintelmann V. Pharmacological properties and therapeutic profile of artichoke (Cynara scolymus L.)] Wien Med Wochenschr. 1999;149(8-10):241-7.
  • Saenz Rodriguez T, Garcia Gimenez D, de la Puerta Vazquez R. Choleretic activity and biliary elimination of lipids and bile acids induced by an artichoke leaf extract in rats. Phytomedicine. 2002 Dec;9(8):687-93.
  • Llorach R, Espin JC, Tomas-Barberan FA, Ferreres F. Artichoke (Cynara scolymus L.) byproducts as a potential source of health-promoting antioxidant phenolics. J Agric Food Chem. 2002 Jun 5;50(12):3458-64.
  • Lopez-Molina D, Navarro-Martinez MD, Rojas Melgarejo F, Hiner AN, Chazarra S, Rodriguez-Lopez JN. Molecular properties and prebiotic effect of inulin obtained from artichoke (Cynara scolymus L.). Phytochemistry. 2005 Jun;66(12):1476-84.

Esta información es sólo para profesionales sanitarios y no podrá ser utilizada por el público en general.